BLW (BABY LED WEANING)

A lo largo de los últimos años, el BLW está cogiendo fuerza. 

Se trata del destete o alimentación complementaria a demanda del bebé o alimentación complementaria autorregulada por el bebé.

Estas siglas, este nombre, proviene del libro de Gill Rapley, que hace unos años fue traducido por "el niño ya come solo".

No obligar ni insistir para comer. 

Los "mandamientos" del BLW podrían resumirse en: 

1. El bebé manda

2. El sentido común.

3. Ofrecer significa dejar a su alcance. 

4. Ofrecer una cuchara pre-cargada con el alimento para que él se la introduzca en la boca.

5. Jamás dejamos a un bebé comiendo solo (por seguridad y porque es muy importante comer en familia). Prueba con la trona evolutiva. 

6. los alimentos  potencialmente alergenos se introducen progresivamente, de uno en uno, y debemos estar muy atentos a las reacciones en el bebé. (frutos secos, algunas frutas, huevos, lácteos. pescado y marisco). Existen una serie de alimentos que no recomiendan ofrecer antes del año: azúcar, sal, miel (botulismo), bebida y tortitas de maíz (arsénico), algas (yodo), grandes pescados y mariscos (metales), espinacas y acelgas en grandes cantidades (nitratos),...

7. No es todo o nada.

"Nunca ayudes al niño en aquella tarea en la que puede ser exitoso por sí mismo" (excepto cuando él o ella lo pide).

Es muy importante que no olvides que la alimentación complementaria no sustituye nunca a una toma de lactancia, la cual debe ser el alimento principal hasta el primer año.

Debes aprender a distinguir entre un atragantamiento (sucesión de arcadas o toses) de un ahogo verdadero (el alimento obstruye las vías respiratorias).

Según María Montessori, la alimentación:

1. Cuanto más natural, mejor. 

2. Ayuda a que el niño/a tenga contacto directo con la naturaleza.

3. Ambiente preparado.

4. Fomenta la autonomía.

5. Libertad.

6. Sigue al niño/a. JAMÁS DEBEMOS OBLIGAR A COMER.

7. Ni premios ni castigos.

8. Da ejemplo, es SÚPER IMPORTANTE. 

9. La alimentación debe ser algo que integre al niño/a en la sociedad en la que vive.

10. Seamos flexibles.

11. Cuidemos el lenguaje.

He trabajado en escuelas infantiles donde mi experiencia con el momento de la comida ha sido nefasta. Este momento es clave en el aprendizaje y evolución de la personalidad del niño/a. 

Si un niño o una niña, asocia el momento de la comida con algo traumático... desde luego, ese no es el camino. Debe ser un momento de disfrute.

Os recomiendo algunos libros como: 

"Oh! la luna" de Eloísa López.

"Se me hace bola", de Julio Basulto.

"Mi niño no me come", de Carlos González.