la importancia de mancharse

¿Eres de los padres/madres que se llevan las manos a la cabeza cuando tu hijo o hija salta en un charco?, ¿o cuando le da por pintar la pared del salón?

He de decirte que todo eso es más beneficioso de lo que crees.

Atento/a: 

1. Mejora el sistema inmunitario: dejando que el niño/a experimente de forma libre el entorno, sin el "no" continuo de una persona que esté cerca, ayuda a que su sistema inmunitario esté expuesto a la realidad y a los gérmenes. Cuando el pequeño/a está en un ambiente limpio, como puede ser la casa, el ambiente creado es estéril y no permite que su sistema inmune actúe, por lo que se debilita. Ello hace que los niños y niñas sean más propensos a padecer algunas enfermedades y alergias.

2. Mejora el desarrollo de su motricidad: por lo general, ensuciarse implica estar fuera de casa, jugar al aire libre, saltando, corriendo, trepando, tocar texturas diferentes, ... ; en definitiva, explorando el mundo que le rodea. Todo lo que implique movimiento le está ayudando a desarrollar el control motor de su cuerpo.

3. Fomenta su creatividad: No hay nada igual como el mundo real para que el niño/a desarrolle su creatividad: saltar en charcos, oler flores, subir a una montaña, caerse en el barro,..., todo ello ayuda a que experimente el mundo que tiene a su alrededor, todas son experiencias que suman.  De esta forma, desarrollará una personalidad fuerte, aprenderá a relacionarse con los demás, a interactuar con el entorno de una forma sana.

4. Aprende a amar y respetar la naturaleza: Conocer su entorno también es aprender a respetarlo. Es importantísimo que el niño/a se relacione con la naturaleza desde pequeño/a, mostrándole así la importancia de cada gesto: las consecuencias de tirar algo al suelo, de arrancar flores,... Esta relación con el entorno facilita el desarrollo de su imaginación y receptividad, mostrándole un sinfín de texturas, olores, colores y sabores. 

5. Aumenta su autoestima: Lo único que un niño/a tiene que hacer es aprender y si estamos continuamente con el "no" en la boca, le estamos prohibiendo ese aprendizaje, limitándoselo. La importancia del juego al aire libre ayuda a formar habilidades como la imaginación, perseverancia, esfuerzo, capacidad de resolución,...la construcción de su autoestima. 

6. Ensuciarse forma parte de la vida: Impedir que el niño/a se ensucie crea una sensación de utopía para él/ella. La suciedad existe, es real y forma parte de nuestro día a día. Por supuesto, es imprescindible tener hábitos de higiene y saludables para evitar enfermedades pero también lo es que tu hijo/a sepa convivir con la suciedad. Esto le ayudará a aceptar la realidad tal y como es y a no tener miedos infundados, desarrollándose como una persona íntegra.

7. Aprender a no autolimitarse: Es fundamental que el niño/a tenga su propio espacio, experimente. Si a todo le decimos "no toques, no hagas, ...", limitamos su experiencia y no les dejamos ser como son. El uso excesivo de este monosílabo, frenará al niñ@ a experimentar, a conocer,...y hará que el adulto de mañana tenga miedo a hacer ciertas cosas, se ponga límites, no se vea capaz para algo. La sobreprotección no tiene ningún beneficio ni para ell@s ni para nosotr@s. Déjale su espacio. 

Permite que tu hijo/a juegue libremente, no le pongas límites que frenen el desarrollo de su autoestima, ya bastantes  pone la vida.  Deja que sea como él/ella quiera ser y ayuda a que desarrolle sus capacidades. Acompaña pero no invadas.