trastorno de conducta alimentaria (TCA)

Los TCA son trastornos mentales que se caracterizan por un comportamiento patológico frente a la ingesta de alimentos y una obsesión por controlar el peso. 


Son muchos los padres y las madres que dicen la frase de "este niño o esta niña no come nada".
A veces, se le da importancia sin tenerla y viceversa. Por ello, una adecuada atención temprana es fundamental para evitar problemas mayores en el futuro. 

  • neofobia: se da en los primeros años de vida y se basa en el rechazo de alimentos nuevos o desconocidos. Suele ser un problema leve que se soluciona con exposiciones repetidas al alimento rechazado.

  • picky eating: este término, usado en literatura, incluye niños "quisquillosos" con poco apetito. Suele ser leve o transitorio.

  • fallo de medro: incapacidad para mantener una capacidad normal de crecimiento, tanto en peso como en longitud, en niños y niñas menores de 3 años. Supone un riego para la salud y para el desarrollo del niño/a a nivel motor, emocional y social.

  • dificultad en la alimentación: engloba cualquier problema relacionado con la alimentación del niño/a.

  • trastorno de la conducta alimentaria del niño pequeño: es un problema lo suficientemente importante como para producir un trastorno nutricional o socioemocional en el niño o niña entre los 0 y 6 años de edad. 

En su mayoría, los trastornos de conducta alimentaria, aparecen  entre los 0 y 6 años, siendo más frecuentes en menores de 3 años. 

Son primordiales y referentes los momentos en que el niño/a pasa del biberón o pecho a la cuchara, de la comida triturada a la sólida. 

Este tipo de trastornos también pueden aparecer derivados de otros como problemas genéticos, ambientales, conductuales, emocionales.


La anorexia infantil es más común de lo que imaginas, por desgracia. 

¿Sabías que el número de niños y niñas entre los seis y los doce años con TCA ha aumentado un 50% desde 2010 en nuestro país? (Datos publicados en El Confidencial, Julio 2016).

La anorexia es un trastorno alimenticio cuyo origen es el deseo de perder peso. Quien sufre de anorexia, desea bajar de peso más allá de lo considerado saludable. 

Según el Ministerio de Sanidad español, "los trastornos alimentarios son la tercera enfermedad crónica entre adolescentes y preadolescentes. Afecta a un 6% de los niños y niñas de entre los 8 y 18 años y otro 11% está en riesgo de sufrirlos".


La anorexia es, a nivel mundial, la enfermedad psiquiátrica con la tasa más alta de mortalidad. Ello es consecuencia de la gran importancia que se le da al físico en la vida cotidiana y en los medios de comunicación, así como la mala educación alimenticia. 

Síntomas habituales a tener en cuenta para detectar este problema a tiempo: 

- preocupación excesiva por la figura y el peso desde edades muy tempranas.
- menor ingesta de alimentos.
- el niño o la niña va al baño después de cada comida. 
- extrema sensibilidad al frío.
- gran ingesta de agua.
- presencia de tristeza. 

A nivel psicológico y médico, se han de reeducar los hábitos alimentarios de la mano de un médico especializado, así como acudir a psicoterapia para conocer y tratar los problemas que han empujado al niño/a a esta enfermedad.

Consejos para prevenir la anorexia infantil: 

- Informarse sobre la anorexia infantil y demás problemas alimentarios. 
- Ser un ejemplo.
- Hablar con los hijos/as de la felicidad.
- Enseñarles a alimentarse de forma correcta. 
- No obligarles  que coman todo lo que hay en el plato. 
- Fomentar la práctica del deporte.
- Cocinar con ellos/as. 
- Establecer rutinas alimenticias. 
- Reforzar su autoestima. 
- Hablarle y escucharle. 

















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